Ficción {en portugués}
¿Ficción o realidad? ¿Inventar o presumir de describir lo real?
Tema (re)batido, discutible, de dudoso rigor, casi bordeando el ridículo…
¿Quién para decir que pinta la realidad tal cual? ¿Qué realidad? ¿Y cómo?…
Dejando de lado a socráticos y antecesores consta que Kant exageraba, el
viejo empecinamiento en dar demasiada razón a la razón, el colega Hegel, otro cabezota, quiso
ir más lejos y parece que solo aumentó la confusión, el exaltado Dr. Schopenhauer confirmaba, contrariaba, desmenuzaba, se reía, despotricaba… hoy
aún estamos ahí, sin llegar a un acuerdo, al cual por supuesto nunca llegaremos.
¿O no será que todo y cualquier intento de describir lo real se transforma casi automáticamente en ficción?
¿Y que toda ficción o fantasía es parte integrante de la realidad?
¿No sería más económico, más clarividente y menos importuno cortar camino
e ir directo al meollo, empezando por inventar lo acontecido?
¿Enlazando con maña y malicia, fluidez y refinamiento, pequeños o grandes
eventos, mínimos o máximos episodios cargados de alguna realidad,
de hecho ocurridos o tan solo en la fantasía de quien transcribe detalles y circunstancias,
aplicando luces y sombras, colores, matices, disonancias, harmonías, altos y
bajos, pros y contras, una superabundancia de imaginación?
Ya lo decía el Dr. João Guimarães que “si verdadera, bella es la historia,
se imaginada, todavía más.”
He aprendido durante mis andanzas por ahí, libros y paisajes, cantos, imágenes,
gentes de muchos colores y distintas hablas, que hasta pueda que así sea.